lunes, octubre 05, 2009

Flashes



Ayer, tus ojos iluminaban ese caminar
de miedos y enigmas,
donde la oscuridad se convertía en tu refugio,
en ese cobijo perfecto
que utilizaste para acariciar el cielo
y soñar con el infinito.

Hoy tus ojos parpadean la realidad absurda,
no hay más nada alrededor,
sintiéndose ajena a los susurros del viento,
indiferente, callada;
mientras cada segundo que pasa
se torna en silencio.

Mañana, tus ojos se cerrarán en melancolía
la apatía de seguir en ese camino
donde el verde no existe,
donde el sol dejó de alumbrar;
y dormirás en silencio eterno
sin querer despertar.